A menos que se trate de aplicaciones especiales, las maquinas de corte por chorro de agua suelen tener uno o dos cabezales. En general la máquina resulta más versátil si dispone de dos cabezales, puesto que en muchas ocasiones podremos usar los dos cabezales, uno como maestro y otro como esclavo cortando dos piezas iguales a la vez, duplicando así la producción. Si además los dos cabezales son independientes, además de funcionar como maestro-esclavo, podremos usar los dos cabezales para cortar una sola pieza que posea simetría en espejo.
En general, por un poco mas de precio de la máquina, es aconsejable tener dos cabezales.